Al día de la fecha, el Ministerio Nacional de Ambiente y Desarrollo Sostenible informa que Corrientes es la provincia con más focos ígneos activos del país..
En lo que va del año, se quemó el 10% de la provincia, los incendios no paran, las lluvias que llegan son escasas y la fauna y flora del Iberá se encuentra en un estado sumamente crítico.
En medio de este desastre ecológico, después de dos años de interrupción por la pandemia, la Capital Nacional del Carnaval dió inicio a su edición 2022 el pasado fin de semana.
La polémica se desató en torno a carnavales sí o carnavales no. Quienes están a favor de la interrupción de esta fiesta, alegan que es una falta de respeto a brigadistas, personal voluntario y aquellos conciudadanos que están perdiendo todo durante los incendios.
Localidades como Santo Tomé y Curuzú Cuatiá, por esta razón, decidieron suspender sus actividades carnestolendas. Sin embargo, en la capital de Corrientes el carnaval sigue su curso.
Imágenes de un camión cisterna parado, sin funcionar, detrás de las tribunas del corsódromo Nolo Alias, cuando la provincia pide a gritos recursos para controlar los incendios, recorrieron las redes e indignaron a muchos internautas.
Por otro lado, quienes están a favor de que la fiesta siga, alegan que el carnaval es fuente de ingreso de muchas familias correntinas que ya se vieron afectadas por la suspensión del año pasado.
En medio de la polémica, el Gobernador de la provincia declaró que no desea cortar una fiesta de ingreso para el turismo pero, de agravarse la situación, cancelará el evento.
Por su parte, Eduardo Tassano, Intendente de Corrientes, afirmó que un importante porcentaje de las entradas será donado para colaborar con los afectados. Habilitarán puntos receptores de donaciones en el corsódromo, tanto en los carnavales oficiales como en los barriales, como así también en la Peña Oficial y en todas las actividades culturales municipales.