Se entiende por biocombustible a aquellos combustibles que se obtienen de biomasa (restos orgánicos). El término biomasa, se refiere a cualquier tipo de materia orgánica que haya tenido su origen en el proceso biológico de organismos vivos, como plantas, o los desechos metabólicos (el estiércol)de un animal; el concepto de biomasa comprende productos tanto de origen vegetal como de origen animal.
Los biocombustibles también son aquellos biocarburantes como alcoholes, éteres, ésteres y otros productos químicos que provienen de compuestos orgánicos de base celulósica, extraídos de plantas silvestres o de cultivo, que sustituyen en mayor o en menor parte el uso de la gasolina.
Los componentes actuales habitualmente son del azúcar, la fibra de cáñamo, trigo, maíz o semillas oleaginosas.
Tienen como principal objetivo reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, que sobrecalientan la superficie terrestre y aceleran el cambio climático.
Ellos pueden sustituir parte del consumo de los combustibles fósiles tradicionales, como el petróleo y el carbón; este tipo de combustible se encuentra casi siempre en forma líquida y se usa para accionar los motores de combustión.
Los biocombustibles más desarrollados y usados son el bioetanol y el biodiesel; otras alternativas son el biopropanol y el biobutanol, hasta ahora menos populares.
De esta forma, los biocombustibles aparecen como una fuente de energía alternativa que puede usarse en el caso de que los precios de los hidrocarburos se eleven demasiado o en un horizonte de largo plazo se agoten.
Se diferencian en 5 grupos:
Biomasa primaria: Es la materia orgánica formada directamente de los seres fotosintéticos. Este grupo comprende la biomasa vegetal, incluidos los residuos agrícolas y forestales.
Biomasa secundaria: Es producida por los seres heterótrofos que utilizan en su nutrición la biomasa primaria. La constituyen la materia fecal o la carne de los animales. (ej. grandes felinos)
Biomasa terciaria: Es producida por los seres que se alimentan de biomasa secundaria, por ejemplo los restos y deyecciones (excrementos) de los animales carnívoros que se alimentan de herbívoros.
Biomasa natural: Es la que producen los ecosistemas silvestres; 40% de la biomasa que se produce en la tierra proviene de los océanos. Y la que se puede extraer de los residuos agrícolas y forestales, y de las actividades humanas.
Cultivos energéticos: Recibe esta denominación cualquier cultivo agrícola cuya finalidad sea suministrar la biomasa para producir biocombustibles.
De igual manera, el biocombustible también tiene impactos ambientales y sociales por diversas cuestiones.
Una de las cuestiones es la crisis alimentaria que acarrea el uso alternativo de plantas vegetales como biocombustibles, lo que genera un incremento en el precio de los alimentos. Dado que los biocombustibles se producen a base de alimentos o bien compiten por la tierra que puede ser utilizada para producir alimentos, esta situación impacta en el precio de los alimentos al alza de manera directa al restringir la oferta de cereales para la alimentación, o de manera indirecta si los alimentos son insumos de ganado; lo que a su vez impacta en el precio de la carne y lácteos. Por ejemplo, para llenar el tanque de una camioneta con etanol se requiere el consumo de cereales de una persona al año.
El consumo de agua. Ya que, la producción de biocombustibles implica un consumo elevado de agua dulce para regar los campos. En el mundo, por cada kilogramo de cereal que se produce, se consume 1m3 de agua. Y se estima que el etanol empleado en un automóvil en un recorrido de 20 000 km. implica un consumo de agua equivalente al de 100 personas.
Agroquímicos. La producción de biocombustibles es a la vez contaminante. Ya que, en su cultivo se emplean insumos provenientes de hidrocarburos, tanto en la fertilización como en la fumigación y en el uso de la maquinaria agrícola.
Deforestación. El cultivo de biocombustibles ha generado un proceso de deforestación. La extensión de superficies destinadas a biocombustibles emplea las mismas áreas de pastizales que bosques.
Costos sociales. Los costos sociales también son fuertes. Las áreas de bosques templados y húmedos, praderas y pastizales; buena parte de estas superficies han sido el hábitat de pueblos nativos ligados a su agricultura campesina. No sólo hay un proceso de depredación ecosistémica, sino también el desplazamiento de los aborígenes y su paso del atraso a la indigencia.
Costos elevados de producción. La producción de biocombustibles aún cuesta considerablemente más que la de combustibles fósiles, incluso teniendo en cuenta el fuerte incremento en los precios del petróleo.
Para la producción, almacenamiento y transporte de biocombustibles se requieren grandes cantidades de insumos. Se necesita energía para sembrar, producir fertilizantes o pesticidas, cosechar, transportar y procesar los granos o plantas hasta su forma final de biocombustible.