La sonda Parker de la NASA rebasó los 600.000 kilómetros por hora en su progresivo acercamiento a la gran estrella.
La sonda Parker de la NASA ha conseguido hazañas relevantes desde que la misión se lanzó en agosto de 2018. Por un lado, es la nave que más se aproximó al Sol, rebasando la cercanía que había conseguido la misión Helios 2 en 1976. Además, recientemente batió un nuevo récord de velocidad entre los objetos construidos por la humanidad, al superar la marca de los 600.000 kilómetros por hora en su progresivo acercamiento a la gran estrella.
Paker Solar Probe, el más veloz objeto creado por la humanidad
Según informó la agencia espacial estadounidense, la sonda completó recientemente su 17° acercamiento al Sol y, en ese marco, rompió sus marcas de velocidad anteriores. Con el empuje gravitatorio de la estrella, aceleró a un máximo de 635.266 kilómetros por hora. En noviembre de 2021, había superado los 586.000 kilómetros por hora.
Más allá de sus marcas de velocidad, la sonda Parker de la NASA tiene como propósito aproximarse a Sol para estudiar “de cerca” sus características y misterios. En rigor, se trata del objeto conocido más cercano a la estrella: se encuentra a 7,26 millones de kilómetros de la superficie solar.
Se espera que ambos récords —el de velocidad y la distancia respecto a Sol— vuelvan a ser derribados por el instrumental de la NASA hacia finales de 2024. Los científicos de la agencia tienen previsto que la sonda se acerca tan cerca como a 6,16 millones de kilómetros. No es precisamente cerca, aunque sí es un tramo muy inferior al que separa a la Tierra de su estrella, tramo que ronda los 150 millones de kilómetros. Con las imprecisiones del caso, esa distancia es como viajar de Buenos Aires a Mar del Plata unas 375.000 veces.
¿Por qué es relevante estudiar al Sol?
Fabricada con un escudo térmico de carbono que le permite sobrevivir a las altas temperaturas, Parker Solar Probe es la primera nave espacial que atravesó con éxito la atmósfera exterior de la gran estrella. Cuando inició su aventura en el 2018, los responsables de la misión señalaron que “el Sol está lleno de misterios” y que esta iniciativa tiene las preguntas adecuadas para avanzar hacia las respuestas que se necesitan para conocer más sobre el intrigante Sistema Solar.
El objetivo de la sonda es brindar información relevante sobre la atmósfera del Sol (su corona), estudiar el viento solar y conocer más sobre su influencia en clima espacial. Aquel es un conocimiento cardinal, ya que tales fluctuaciones afectan el funcionamiento de los satélites, las redes de comunicación, las operaciones en el espacio, e incluso a las redes eléctricas en la Tierra.
“Nuestras únicas mediciones del viento solar ocurren cerca de la Tierra, después de que ha tenido que recorrer decenas de millones de kilómetros para difuminarse, enfriarse y mezclarse. Las mediciones de Parker (…) revelan nuevos detalles que deberían ayudar a arrojar luz sobre los procesos que lo envían a toda velocidad hacia el espacio”, explicaron al respecto desde la NASA.